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Jacques dAdelswärd parece un ser de ficción. Pero fue real. Cuando la realidad se vive en los límites, la ficción florece. Este libro de Luis Antonio de Villena es igual, precisamente porque Fersen es su objeto. Parece un relato decadente y tiene mucho de biografía. Parece el análisis riguroso de un personaje trágico, suntuoso y vencido, y al tiempo la absoluta novela de un esteta millonario, en el Capri de Tiberio y de las damas raras y singulares. DAdelswärd fue narrador y poeta (nada desdeñable) pero se narraba y miraba a sí mismo. Como suele suceder, sus contemporáneos lo miraron con trivialidad, porque era demasiado rico y un pecador pagano sin arrepentimientos. Vivió su homosexualidad su pasión por lo masculino joven sin ninguna conciencia de culpa y con la mayor visibilidad, motivo mayor si cabe para el ostracismo y el silencio. Fundó una elegante revista gay de cultura, Akademos, y su final fue el opio y la cocaína, pero también la diosa budista de la Misericordia. ¿Se suicidó? ¿Se cansó tan sólo? ¿Buscó huir, la huida definitiva? Vademécum de un decadente ilustre e ilustrado sería una acertada definición de este Fulgor y desastre en la decadencia. Como sea, se trata de alguien que ganó cara la libertad de vivir su propia vida.Luis Antonio de Villena (Madrid, 1951) es un poeta, narrador, ensayista y articulista español, considerado uno de los más importantes poetas de su generación. Publicó con 19 años su primer libro de poemas. Su obra creativa en verso o prosa ha sido traducida a todas las principales leguas occidentales. Ha recibido el Premio Nacional de la Crítica (1981), el Premio Azorín de novela (1995), el Premio Internacional Ciudad de Melilla de poesía (1997), el Premio Sonrisa Vertical de narrativa erótica (1999), el Premio Internacional de poesía Generación del 27 (2004) y el Premio Internacional de Poesía Viaje del Parnaso (2007). En 2004 fue nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad de Lille (Francia).Su obra es muy extensa y en ella siempre ha plasmado su atracción por el ideal clásico y su idealizada concepción de la belleza efébica.
Agotado